Las Vegas, resplandeciente con letreros de neón, ganó fama durante mucho tiempo como el centro turístico más grande de los Estados Unidos. La emoción y el lujo reinan aquí, los casinos están abiertos las 24 horas y un flujo interminable de espectáculos y entretenimiento captura al turista con la cabeza. No en vano, en Las Vegas la gente se olvida de la realidad y de los asuntos cotidianos y se entrega por completo a la diversión desenfrenada.
El atractivo brillo de los gigantescos hoteles y casinos Luxor Las Vegas, Bellagio y Caesars Palace atrae a turistas de todo el mundo como un imán. Las colecciones inusuales de los museos locales hacen que incluso los amantes empedernidos de los clásicos reconsideren su actitud hacia el arte y no quieran abandonar los parques de atracciones. Las Vegas es una ciudad increíble, un fantasma en medio del desierto y un oasis acogedor que le da al viajero la ilusión de la infinita ligereza del ser.