Un viaje a Bangladesh es una solución bastante exótica para unas vacaciones, pero este país es aún más interesante para los turistas sofisticados. Bangladesh se distingue por una increíble mezcla de naciones, culturas y religiones. Los colores brillantes del país se encienden en numerosos festivales y festividades budistas, hindúes, cristianas y musulmanas. Debido a la mezcla de varios calendarios, los representantes de varias religiones a menudo participan en procesiones, creando la sensación de un carnaval sin fin.
Bangladesh tiene una naturaleza sorprendentemente hermosa, una rica variedad de fauna y flora, que se pueden encontrar en los parques nacionales Sundarbans, Chittagong y Madhuriyur. La localidad costera local de Cox's Bazar está a 200 km. playas casi desiertas bañadas por las cálidas aguas de la Bahía de Bengala. En la capital del estado, Dhaka, los coloridos bazares orientales son ruidosos y más de 700 mezquitas piden oraciones, mientras que los antiguos monasterios budistas se esconden en los bosques de manglares, donde a los viajeros no se les negará alojamiento para pasar la noche.
La infraestructura turística de Bangladesh todavía no está muy bien desarrollada. Confortables hoteles de 4* y 5* se encuentran en Dhaka y Chittagong, en otros lugares se puede contar con una “casa de huéspedes” más o menos decente. En las zonas remotas del país prácticamente no hay alojamiento adecuado para turistas, pero los extranjeros rara vez miran por estos lares.