Estonia es un país marítimo en el norte de Europa. Su territorio está ocupado casi en su mitad por bosques, y el número total de islas supera las dos mil. El turismo está bien desarrollado en Estonia. Esto se ve facilitado no solo por la increíble naturaleza, sino también por el patrimonio cultural único.
Aquí hay muchos parques nacionales, donde los visitantes tienen la oportunidad de observar el mundo animal por su cuenta. La mayoría de las reservas naturales están listas para brindar a sus huéspedes varios tipos de recreación, según sus preferencias. Los hoteles cómodos son más adecuados para las vacaciones familiares, y los campamentos de tiendas de campaña atraerán a los aventureros.
Los amantes de la historia y la arquitectura adorarán las hermosas calles sinuosas, los castillos y los palacios de la Ciudad Vieja. En particular, como el Castillo de Glen, los castillos de Maaryamyagi y Toompea, así como el Tallin Ayuntamiento. Como souvenirs, lino hecho a mano y productos de punto, productos de vidrio coloreado, así como el chocolate "Kalev" y el famoso licor "Old Tallinn" se traen tradicionalmente de Estonia.